En la película (bueno tres en total si contamos la original Los 7 Samurai 1954, Los 7 Magníficos 1960, y el “refrito” Los 7 Magníficos 2016), el argumento es, y de una vez su similitud con las 7 unidades básicas de medición, más o menos así: un pueblito (su departamento de metrología) es asaltado periódicamente por bandidos (hacer malas mediciones con sistemas obsoletos, equipos no calibrados, medidas basadas en el largo de una parte del cuerpo de un rey, etc.). El anciano del pueblo sugiere contratar a los samuráis/pistoleros por poca paga (esperemos que no sea el caso de nuestros amigos metrólogos y que las empresas aprecien su excelente trabajo), y así nuestros siete héroes logran defender al pueblito (sistemas de medición exactos y precisos, trazables a las 7 unidades básicas).
Ya hace unos días comentamos sobre la nueva definición del kilogramo (ver aquí). Con esta nueva definición se vieron beneficiadas otras unidades básicas, y por eso en esta ocasión vamos a aprovechar para que les queden a mano las nuevas definiciones, todas basadas en constantes universales y por lo tanto ninguna requiere trazabilidad a artefactos o experimentos correctos pero teóricos e imposibles de realizar.
Primero tenemos que entender las 7 constantes universales que nos permiten este hito científico – tecnológico – ingenieril.
Ahora podemos ver como cada una se relaciona con una unidad básica.
Además de las unidades básicas hay dos unidades suplementarias para medir ángulos planos (radián) o sólidos (estereorradián)
Y finalmente estas son las nuevas definiciones.
Ojalá todos entendamos el gran momento histórico que disfrutamos con este enorme cambio. Pueden estar seguros que a partir del 2019 la trazabilidad de sus sistemas de calibración será mejor que nunca.
Autores: Edwin Garro y Ariel Ramos